RIVER A PASO FIRME

Con la diferencia lograda en el partido de ida, River de Embarcacion se aseguro un boleto a la próxima Fase,igualo 1-1 con Atlas, en Salta y ahora enfrentará a  Rio Dorado de Apolinario Saravia, Mas de 1.000 hinchas acompañaron al tripero.

Mucho se hablo del cruce entre River de Embarcación y el Deportivo Atlas, una serie a ciento ochenta minutos que tuvo numerosas situaciones en el medio. Con un tripero que fue superior al tigre capitalino, y no solo en el encuentro disputado en Tabacal, sino también en lo que se mostró en el predio de la Liga Salteña. El elenco de Miguel Velarde mostró oficio y experiencia para sobrellevar el encuentro en Salta y mantener la gran diferencia que sacó siete días antes en el norte de la provincia.
Atlas puso todo, amor propio, garra y corazón, pero enfrente tuvo un equipo compacto que supo manejar las diversas situaciones del partido.
El “tigre” salió dispuesto a recortar rápidamente la brecha de goles, pero de a poco el visitante se fue acomodando y cerrando los caminos a la ofensiva local, Rivadeneira no podía recibir tranquilo ninguna bocha, y esto Atlas lo sentía, con el trámite parejo y disputado la primera situación clara llegó recién a los treinta y cuatro minutos, Rivadeneira logró escapar a su marca y de media vuelta ejecutó un disparo que salió cerca del palo de José Caram. Esta aproximación fue la máxima jugada de riesgo para la tranquila tarde del uno de River.



JUAN ARAUJO INGRESO EN EL 2º TIEMPO

 El complemento arrancó mejor para el elenco de la pedrera, Sebastián Santillán encontró un hueco y coló la pelota en el ángulo de Caram desde fuera del área. Este grito levantó al público local y entusiasmo a los jugadores de Atlas, que un minuto más tarde tuvo otra con Mauricio Haro, pero el uno tripero logró intervenir para que la pelota salga al córner. El goleador de Atlas, Eduardo Rivadeneira también pudo aumentar, a los siete, pero el golero Caram le ganó el duelo y se quedó con el gol del equipo de Jorge Honecker. De a poco River fue saliendo del asedio y Atlas entrando en el terreno de la desesperación, el reloj corría y el tigre veía que se le escapaba el objetivo de clasificación. Con un Atlas totalmente jugado llegó la contra del equipo de Embarcación, falta al borde del área y roja para el central Fernando Trejo, el eterno “huracán” Orlando Cardozo ejecutó la falta y puso la pelota en la cabeza de Sebastián Quinteros, el ex jugador de Juventud Antoniana le cambió el palo a Villagrán y decretó la igualdad para la visita, locura total en las casi mil almas que pintaron el predio de la Liga de rojo y blanco. Los últimos cinco minutos fueron una anécdota, para que ante cada pase la gente visitante delire y cante con toda la furia, la desazón de Atlas ya se veía en el ambiente, el equipo dejó todo pero no alcanzó para lograr la hazaña.
Para destacar el cálido saludo entre los rivales al final del partido demostrando que esto no es más que un partido de fútbol, el deporte que siempre da revancha y sino que lo diga River que se vengó de la eliminación en el certamen pasado y ahora piensa en la siguiente fase, donde lo espera otro salteño: Río Dorado de Apolinario Saravia.
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Atlas: 1
Jorge Villagrán; Sebastián Santillán, Fernando Trejo, Alberto Mamaní, Jesús Lambertín, Angel Gutiérrez, José Michel, Ariel Zambrano, Mauricio Haro, Marcelo Lami, Eduardo Rivadeneira. Suplentes: Jorge Lassi, Juan Pablo Ríos, Juan Pablo Mamaní. DT: Jorge Honecker.
River: 1
José Caram; Carlos Gutiérrez, Héctor Ignacio, Sebastián Quinteros, Luis Frías; Claudio Campos, Juan José Quiroga, Oscar Paredes, Walter Cazon; Emilio Vallejo, Orlando Cardozo. Suplentes: Víctor Contreras, Luis Olivera. DT: Miguel Velarde.
Estadio: Liga Salteña. Arbitro: Martín Rivera (Jujuy). Goles: ST: 3’ Santillán (A), 39’ Quinteros (RP). Cambios: Jorge Honecker x Zambrano (A), Raúl Abdala x Gutiérrez (A), Jesús Miranda x Vallejo (RP), Juan Araujo x Paredes (RP), Matías Carles x Campos (RP). Incidencias: ST: 38’ expulsados Trejo (A) por juego brusco, Cazon (RP) por doble amonestación.

FUENTE: FUTBOL SALTEÑO. TEXTO: JOSE SANCHEZ.